jueves, 31 de mayo de 2012

Un hombre no es capaz de parar de reir después de someterse a una operación de cadera

Mi amigo de hoy fue operado de la cadera con éxito pero su intervención tuvo un efecto secundario inesperado. No puede parar de reírse sin motivo alguno. Su mujer, que es bastante fría y aburrida, está cansada de tener una máquina de reír a su lado y se queja de que no puede ni discutir a gusto. ¿A vosotros os gustaría que vuestra pareja se pasase la vida riendo sin parar? Probad con una operación de cadera en caso afirmativo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario