Mi segunda amiga de hoy es alemana y se llama Mariam. Su vida fue de lo más normal hasta que a los 21 años dio a luz a su hijo. Poco después del parto vio como empezaba a crecerle pelo en la cara y es que, aunque parezca mentira, las hormonas pueden tener este efecto al tener un hijo. Durante mucho tiempo estuvo probando técnicas para quitarlo hasta que finalmente decidió rendirse.
Hace 5 años tomo la decisión de dejar que le creciese el pelo hasta que finalmente le salió una especie de perilla. Ahora trabaja de mujer barbuda en un circo y asegura que todo le va mucho mejor que antes y que incluso está lista para empezar una relación. Si os gustan las mujeres de 49 años con barba, intentad contactar con ella...
Fuente: NY Daily News
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