Mi segundo amigo de hoy es un doctor de Texas que opina que escuchar música de Adele te convierte en gay, algo así como la cobra venenosa gay pero por los oídos. John Smid ayuda a los gays a rehabilitarse y a desprenderse de las cosas que le vuelven a uno gay. Para él, hay que dejar de lado Adele y centrarse sólo en la música cristiana.
Entre otras cosas que también te vuelven gay, están los calzoncillos ajustados porque considera que aumentan la sensualidad y la necesidad de sexo. Se da la circunstancia de que, hace un tiempo, el propio Smid reconoció que él era gay también y que vivía engañando a su mujer. Todo un caso este John.
Fuente: Edge on the Net
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