Mi amigo de hoy es un poco raro y para muchos asqueroso. Resulta que Louis Cole, un inglés de 28 años, no tenía un trabajo que le gustase y se decidió a probar algo nuevo. Nunca mejor dicho, empezó a llevarse a la boca lo primero que se encontraba en el suelo y a enseñarle al mundo cómo lo hacía.
Se ve que ha tenido éxito y ahora se dedica a comer escorpiones, sesos de animales, ratas, tarántulas y demás cosas apetitosas. No sé qué tal le sentará toda esta comida teniendo en cuenta que se toma cruda la gran mayoría pero mientras Louis pueda vivir de ello, habrá que respetar su elección.
Fuente: Telecinco
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